La sonrisa del presidente francés, Nicolás Sarkozy, es inmutable y está por encima de lo que su boca diga. Este sábado el presidente de Francia estrechaba la mano de los asistentes al Salón de Agricultura, cuando se acercó a uno de ellos éste le dijo: "no me toques, que me ensucias". Sarkozy ha mantenido la sonrisa pero se le ha escapado un insulto al ciudadano.
El presidente francés ha respondido al hombre que le ha rechazado la mano con un "pues, entonces te largas", seguido de un "pobre imbécil" para sus adentros pero que ha quedado registrado por las cámaras que cubrían la visita. A Sarkozy le seguían por su paseo colaboradores y guardaespaldas entre aplausos y abucheos que se confundían con el mugido de una vaca.
Bruni se estrena
Con misma sonrisa, pero con una intachable cordialidad recibía este sábado el presidente a la familia de la política secuestrada por las FARC, Ingrid Betancourt. En esta reunión Carla Bruni consumó su matrimonio, ejerciendo oficialmente de primera dama en su primera visita oficial.
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